Que viene el gordooooo ¡¡¡¡

Otro año más. Todo está preparado. Menuda pasta nos dejamos los españolitos en la lotería de navidad. Yo este año me he pasaooooo. Muchos euros me he “gastao” y me temo que para nada. Pero bueno es ya un ritual, una tradición. Hay que comprar lotería para el sorteo de navidad. Mañana todo el mundo mirando a ver qué número sale, todas las televisiones con sus cámaras preparadas para retransmitir el sorteo. No falta un detalle. Los niños cantores con sus vocecitas preparadas, me gustaba más cuando decían: “peseeeeetas”. Todas las bolas dentro de los bombos dispuestos a dar muchas vueltas. Solo hace falta que la que lleva el número que yo compré, coincida con la que marca el primer premio. Una bolita puede darme la felicidad. Y entonces ¡¡¡lluvia de millones¡¡¡ Tendría que comprar champán, prometer que reparto el premio y decir que voy a ayudar a mucha gente (es lo que hacen todos no?). Bueno en fin, no estaría mal que ocurriese, no lo voy a negar, pero yo ya he ganado el gordo de navidad año tras año. Lo gano por tener la familia que tengo, los amigos y el trabajo que quiero tener y el amor………aún no lo tengo pero sé que algún día llegará. Aunque os confieso que ya he comprado las participaciones del sorteo del Niño……¡¡¡¡ Quién no juega, no gana.

Azabache

Hoy he dicho esa palabra después de mucho tiempo, para referirme a algo oscuro: negro azabache. Desde entonces no he dejado de repetir su sonido en mi cabeza. De pequeño tengo muchas fotos con una higa de azabache colgada en mi cuello. Un talismán. Cosas de mi abuela. Me protegía del mal de ojo; decía. No sé cual es el origen de esa palabra, a mí me suena a árabe. La relaciono con las historias que ella me contaba en la infancia, sobre la fortaleza musulmana que hay en la montaña, donde a sus faldas, se encuentra mi pueblo. Decía que existieron romances, reinas moras que huían por cuevas llevándose todos sus tesoros, feroces batallas y mágicos hechiceros. Yo la creía a pies juntillas sentado en su regazo. Ella vestía siempre de negro, de negro luto por la muerte de mi abuelo a quién no conocí, y de quién heredé el nombre. Ella era azabache, por fuera y por dentro. Era fuerte y dominante, con genio y carácter; pero con un corazón intenso, capaz de dar amor pleno a todos los que tenía cerca. Nunca la olvidaré. Yo quiero ser también así, quiero ser negro azabache desde el pelo, los ojos, la piel, la saliva y el alma. Quiero ser más intenso de lo que soy. Quiero ser tu talismán. Quiero que mi sangre sea negra para poder sentir más intensamente y dejar huella en la gente que encuentro en mi vida. Ya sabes, recuerdame así: Azabache.

Movida con el móvil

He decidido cambiar el teléfono móvil. El mío está obsoleto. Es un cacharro del pleistoceno en este mundo de las tecnologías. Dispuesto a ello entro en una tienda del sector (no diré el nombre para no hacer publicidad). Muy amablemente la chica me pregunta cuál modelo busco; ¿y yo que sé?, "pues....uno que esté bien" respondí. Craso error. He descubierto que en este mundo de la telefonía móvil no eres nadie si no tienes un modelo con tecnología wap, infrarrojos, bluetooth, videollamadas, radio, Mp3......¡que barbaridad¡. Ya solo falta que le pongan una microescoba incorporada para barrerte la casa. O mejor aún, un consolador para los momentos de soledad...... Doscientos modelos en el expositor......como para acordarse de las características de cada uno¡¡¡¡¡¡¡. Mientras buscaba el cacharro que más me gustaba he pensado ¿que más da uno u otro?. Si yo lo único que quiero es oir la voz al otro lado, la voz de mi gente, de los míos. Lo único que yo quiero es leer cada uno de los mensajes que recibo de mis amigos y poder decirles, con los que yo envío, lo importantes que son para mí y lo mucho que los necesito. Solo con ver tu nombre en la pantalla y escuchar el sonido de tu voz al otro lado me das vida, un soplo de alegría, de ilusión, de igual modo que la ausencia de la llamada me produce tristeza. Da igual las prestaciones, el sonido del mensaje o el de la llamada, solo con saber hay alguien detrás me basta. Alguien que además, es de los míos, a quien le dí mi número porque ya me había dado su amistad o ésta empezó después, pero aún persiste. Siempre estaré al otro lado para tí, a cualquier hora del día, los 365 días al año: porque te quiero aunque a veces no te lo diga.
He salido de la tienda con mi viejo móvil, no voy a cambiarlo de momento.
P.D.: Para todos los que teneis mi número: OS QUIERO.

A Ti, por Ti

Caminar , solo caminar y caminando en soledad por ti , por todo tu ser, por tus callejuelas y recobecos. Paso a paso por cada uno de ellos, redescubriendo la magia, encanto y olor a historia que desprenden. Alejarme de ti y de todo lo que representabas fue tan duro para mi...¡¡ Hoy te recuerdo desde la distancia porque de nuevo siento igual. Alejarse de algo o alguien y más si te tienes que ir sin querer irte, es doblemente doloroso. La vida es eso, un ir y venir de buenos y malos momentos, de experiencias y un contínuo paseo: caminando, caminando....Pero siempre estarán ahí todos los recuerdos, en parte es bueno porque mantienen viva tu historia y en parte es malo porque se remueve la llaga de una herida pasada. Es lo unico que a veces queda recuerdos sin mas, como todos y cada uno de los que yo guardo en mi interior de ti: aromas, luz, sol, calidez, majestuosidad....Siempre tu, siempre conmigo : mi Córdoba.